Relatos de café

El atractivo del campo para quienes nos encontramos en la ciudad, pero además hemos tenido ancestros campesinos es como un Imán que nos convoca a volver a nuestras esencias, es así como Clara Esperanza Pedraza Goyeneche, decide iniciar un proyecto de vida personal, familiar y colectivo alrededor de la compra de una finca de descanso y para vivienda. La ruralidad colombiana está llena de posibilidades, pero también de necesidades frente a las que se requiere de seres humanos comprometidos con su desarrollo y con la calidad de vida de sus campesinos. Es así como en la búsqueda junto con su esposo descubre que tienen una vocación rural que proviene de sus ancestros y deciden apostarle a un proyecto distinto, encuentran una finca que hoy lleva el nombre de Terranova en Anolima Cundinamarca, haciendo alusión a una tierra nueva que les posibilita una vida nueva. Descubren allí un hábitat lleno de diversos nichos ecológicos que evocan la vida en todo momento y esa conexión directa con la naturaleza, bosques naturales, cítricos y otras variedades. Avanzando tras ese bosque en medio de la luz del sol que acompañaba el camino se encuentra un resplandor de hojas verdes brillantes y frutos rojos como la cereza provocativos, con aromas y sabores que permiten disfrutar una gran variedad de sensaciones afrutadas y sutiles fragancias maderosas del bosque que le rodea. Allí nace café Idílico, en el año 2012 como una promesa para compartir con su familia, amigos, allegados y todos los amantes de un buen café: Café 100% colombiano